Yesca

Enfermedad conocida desde muy antiguo en los países donde se cultiva la vid. La enfermedad se halla presente en todas las comarcas vitícolas españolas

Los agentes causales de la yesca son hongos lignófagos (comen madera) que se desarrollan en el seno de los tejidos lignificados de la vid, provocando su desorganización y finalmente necrosis. De manera excepcional pueden desarrollar en la superficie de la cepa, un carpóforo productor de basidiosporas, agentes de la difusión del inóculo.

Los primeros en penetrar (precursores), pertenecen a distintos géneros: Acremonium, Eutypa, Shaeropsis, etc., y confieren a la madera un color oscuro y una consistencia dura. Posteriormente, se produce la invasión de los hongos citados en primer lugar, que convierten la madera en blanda y amarillenta (yesca). Las heridas gruesas y la mayor edad del viñedo son favorables a la instalación de la enfermedad. La aparición de síntomas externos es provocada por las dificultades opuestas a la circulación de savia

La importancia de la enfermedad se refleja, más que en las pérdidas de un año determinado, en su constancia y progresión a lo largo de ellos, a medida que la plantación envejece. La sintomatología puede manifestarse de forma lenta pudiendo afectar a la vegetación de uno o varios brazos de cepas generalmente aisladas. Los síntomas suelen iniciarse en verano y consisten en la aparición de decoloraciones internerviales y en los bordes de las hojas, que confluyen y van secándose en el centro. De forma rápida, suele ocurrir en los climas más cálidos y en pleno verano, en muy pocos días, comenzando por las hojas del extremo de los sarmientos.

El arsenito sódico, que es eficaz también contra «piral» y «excoriosis», es un producto muy tóxico para el hombre y los animales, por lo que deben guardarse las debidas precauciones, a las que en este caso hay que unir la de evitar todo contacto con la piel, en especial si hay heridas, pues al ser un producto soluble en el agua puede ser absorbido por ellas. Puede emplearse fluxilazol+carbendazima (aplicado sobre cortes de madera), quinosol o tebuconazol+resinas (después de la poda sobre los cortes)